La llegada de «un nuevo hermanito/a a la familia «es un acontecimiento que siempre nos “descoloca” a todos para poder integrar en la familia al nuevo bebé que esta por llegar, Nos pasa cuando nos convertimos en padre o madre por primera vez y vuelve a suceder con la llegada del nuevo miembro.
Son muchos los motivos que pueden hacer que ese tiempo de adaptación se haga tardío para adaptarnos, mucho influirá de cómo estuviéramos de preparados previamente, si el embarazo ha sido deseado o ha venido “por sorpresa”, si llega en un momento personal de calma o de estrés, Lo que está claro es que «mientras más preparados estemos para el nuevo cambio en nuestras vidas, será mucho mejor«.
Por qué pensad que si a los padres que ya tenemos experiencia en el ámbito se nos ara difícil la llegada del nuevo bebe, como podría ser de complicado para el nuevo hermano/a mayor, que experimentara todos estos cambios por primera vez.

El nuevo bebé
Y sucede; El nuevo y minúsculo miembro de la familia llega a su nuevo hogar, mientras que para el hermano mayor todo su mundo se viene abajo, por qué?, por qué pasa de ser el centro del universo en cual todos los planetas giraban a su alrededor y era el protagonista, a un nuevo satélite en el cual ahora papá y mamá depositan toda su atención.
Se que el texto os parecerá un poco duro verdad?, pues eso no será lo más complicado, sino depende de la edad que tenga el hermano/a mayor, que a lo mejor ni siquiera este preparado/a para afrontar la llegada de su hermano/a, esto es lo que podría pasar por su cabeza en esos primeros días.
Ahora os pondré el punto de vista desde el cual podrían pensar vuestro hijos/as mayores.
- Mami siempre me ha cuidado, pero ahora pasa mucho tiempo con el bebé, y apenas me mira, creo que ya no me quiere y quiere solo al bebé.
- Papi que solo ha estado pendiente al momento de ayudarme, ahora me dice que soy mayor y que tengo que hacerlo/a solo/a, me gustaría ser un bebe de nuevo.
- La abuela que siempre al verme corría a cogerme en brazos, ahora solo coge en brazos al bebé y me dice que tengo que ejercer de hermano mayor, no quiero que el bebé este aquí.
Es en absoluto lo mas normal del mundo que nuestros primogénitos piensen de esta manera, al igual que lleguen a sentirse asustados, confundidos, y hasta un tanto perdidos/as, también podrían enfadarse mas de la cuenta con nosotras pues hemos puesto en duda la seguridad de su entorno, también es normal que sientan cierto rechazo hacia el bebé al final de todo es el origen de todos los cambios que ahora están afrontando.
Como hemos dicho antes, ahora podemos entender un poco lo complicado que puede llegar a ser el aceptar al nuevo hermanito/a, pero esto no nos puede servir de excusa para quedarnos atascados ahí, pues ya es de mal trago todo los cambios que esta afrontando el hermano/a mayor.
Dicho esto, la mejor forma en la que podemos preparar la llegada del hermanito/a y habla sobre el tema con el hermano/a o mayor va a depender en gran medida, de la edad que tenga nuestro primogénito, por que no es lo mismo que tengan de diferencia 15 meses a que se lleven 3 años, ni 3 años que se lleven 7, pero sin duda seremos los mejores guías para afrontar esta nueva etapa juntos.
Familiarizar al niño con el tema
Cuando creemos que hacemos bien en preguntarle al niño si desea tener un hermanito/a en realidad creamos el efecto contrario por qué tiene todo el derecho en negarse a tenerlo/a y seguramente es la decisión que haya tomado, así que la mejor opción es contárselo cuando ya estemos seguros de que el hermanito/a ya esta en camino, y algo que puede fortalecer este tema es:
- Decirle la verdad: hablarle sinceramente que en unos meses se convertirá en hermano/a mayor.
- Crear el vinculo: como ya os mencione anteriormente esto empieza desde el embarazo, tenemos que implicar en todo al hermano/a mayor, pedirle que le hable al bebé que esta en la barriga de mamá, cantarle, contarle un cuento, hasta pedirle que venga a ver al bebe en una ecógrafia todo será valido para crear ese vinculo que desde ya lo haga acercarse al nuevo miembro que esta por llegar.
- siempre es bueno medir la afinidad con los padres: con esto me refiero a que si el niño/a muestra mas afinidad con mamá o la necesite mas para ciertas cosas, podríamos empezar a crear un vinculo mas afín con papá y así será con quien aproveche mas el tiempo cuando nazca el bebé.
- Contarle cómo fue su embarazo: Tratar en medida de lo posible por ejemplo en enseñarle fotos de cuando estabas embarazada de el/a, contarle si se movía mucho o si se dejaba ver en las revisiones etc.
- Dejarlo participar: Dejar que sea participe en todo lo que tenga que ver con preparar la llegada del nuevo miembro de la familia, ya sea escoger la ropa, tal vez el color de la habitación, tener unos cuantos nombres claros y pedirle que te de su opinión de cual de ellos le gustaría para su nuevo hermano/a.
- Pedirle ayuda: Decirle que te hecha una mano a preparar la bolsa del hospital, es una manera de que sepa las necesidades que tendrá el nuevo bebé.
- Dejar que le escoja un regalo en concreto: seria muy buena idea dejar que días antes del parto el/a escoja un regalo para cuando nazca y vaya a conocer a su hermanito/a ya sea una mantilla, un sonajero, un peluche blandito, etc.
El momento de que los hermanos se conozcan
Ese momento en el que se encuentren por primera vez sin lugar a duda será mágico para los padres, y algunas maneras que pueden hacer que los lazos sean mas fuertes son:
- Intercambio de regalos: un buen comienzo es pedirle al reciente hermano mayor que le dé el regalo que anteriormente eligió para el bebé así tendría un recuerdo de cuando conoció a su hermano/a, no hace falta que sea nada caro ni mucho menos grande, cualquier detalle siempre será bueno.
- Dejar que se familiarice con su hermano/a: algo muy bonito tanto como para el/a y los padres es ver cómo su hermano/a lo coge en brazos por primera vez, siempre asegurándonos de ayudarlos a mantener la cabecita del bebé.
- Un momento de intimidad: Va a ser un momento muy especial para todos así que seria mejor si no se coincide con visita, Es cuestión de ser sinceros. Cuando nació mi primer hijo y después del parto tenia un cansancio y las visitas eran constantes llegue a sentir tal agobio que pensé que caería en depresión, por eso con mi segundo hijo tenia muy claro que quería intimidad para estar a solas con la familia mas cercana, con el tema de “restringir” las visitas siempre hay quien se molestara pero no podemos tener contento a todo el mundo, y la ocasión merece que se viva en intimidad.

Primeros dias siendo cuatro
- Los primeros días, las primeras semanas e incluso los primeros meses no serán nada fáciles y al contrario serán muy agotadores por que toda nuestra atención que antes solo se basaba en un niño/a ahora se vera multiplicada por dos y el cansancio será extremo, haciendo parte de ello que también podamos dedicarle menos tiempo a nuestro hijo/a mayor.
- Para hacerlo mas fácil para todos y mucho mas para nuestro primogénito/a, podríamos empezar por pedirle a las visitas y mas si son las de confianza que muestren mucho mas interés que por el recién nacido a la hora de saludarlo y así demostrarle que sigue siendo muy importante para todos, total el bebé lo único que necesita es descansar, estar tranquilo y cerca de su madre, tenemos que hacerle saber al hermano/a mayor que todo es igual que antes y nada ha cambiado, una opción muy buena seria pedirle que nos presente a su hermanito/a.
- Con este nuevo cambio para la familia lo justo es repartir las tareas del hogar por igual, en nuestro caso somos dos, entonces cada uno con un niño, el bebe siempre con mamá ya que sus necesidades son a demanda, así que nuestra pareja es quien tiene que hacerse cargo de atender las mayores necesidades de nuestro primogénito/a, como ya os he dicho antes se que los primeros días resultan realmente agotadores, pero todo esto se compensara mas a delante cuando hayamos establecido bien las bases de la nueva organización familiar, si le hacemos entender a nuestro hijo/a mayor que aunque todo haya cambiado tan rápido y sigue siendo atendido y escuchado igual que antes, nos ara una convivencia mas amena a toda la familia.
- No pidamos mas de lo que nos puede dar, y con esto me refiero a que solo han pasado unos días desde que se ha convertido en hermano/a mayor, las frases tales como «ya eres mayor y tienes que hacerlo solo», no, por que no es mayor y si nos pide ayuda para hacer alguna cosa hay que ayudarlo. Podríamos cambiar la frase a «Tu puedes hacerlo por que eres capaz», Forzar su ritmo por que ahora tenemos que atender a otro bebe no es ni justo ni mucho menos positivo para el/a
- Repito una vez mas, a que tarasteis en medida de lo posible el involucrarlo en todo lo respecto al bebé, ya sea cambiarle el pañal, ducharlo, vestirlo, cantarle una canción, esto servirá para afianzar lazos entre ellos y a la vez hacerle sentir que puede cuidar de su hermano/a y ayudarlo en lo que necesite, ademas de que será una buena manera de que se adapte mejor al nuevo cambio.
- Nosotros ya somos consientes del nuevo cambio como adultos que somos, pero esto no quiere decir que ellos/as lo asimilen tan rápido, así que cuando tengáis conversaciones tratad de que no siempre giren en torno al nuevo bebé, como: «te gusta tu nuevo hermanito», «que suerte tienes de tener un hermano/a», las conversaciones o preguntas tienen que ser igual que antes, «como te ha ido en el cole hoy», (esto en caso de que vaya al cole), «que has aprendido hoy», tratar de mantener el orden de siempre, y hacerle sentir que todo va igual le ayudara a que se adapte antes al cambio.
- Mostrarle fotos o videos de cuando era bebé y explicarle que lo mismo que hace su hermano/a ahora lo hacia también el/a, y que por eso necesita mucha atención igual que el/a lo tuvo en su momento, decirle y explicarle que como toda etapa nueva lleva su tiempo y que pronto pasara que no lo hemos sustituido ni mucho menos por el nuevo bebé, ayudara mucho a que lo acepte como deseamos.

Tenemos que tener en cuenta que durante del proceso de crianza seguirán surgiendo conflictos y dudas (muchas dudas), que es lo mas natural del mundo, pero si sabemos enseñarlos y los guiamos de la manera adecuada lograremos crear lazos los suficiente mente fuertes para que nada ni nadie pueda romperlos y que duraran para siempre, entonces estaremos creando el vinculo de ser hermanos.